LA OBRA ES UN MUSICAL QUE PROSIGUE LA RECREACIÓN QUE HIZO EL AUTOR DE «ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS”, DE LEWIS CARROLL

Este fin de semana, el Teatro Principal de Zamora ha acogido el estreno nacional de «Alicia (atraviesa el espejo)”, obra de Daniel Pérez, un musical interpretado por la compañía Réplika, bajo la dirección de Jaroslaw Bielki y Socorro Andón, y con escenografía y vestuario de Agatha Ruiz de la Prada, dos constantes en la trayectoria profesional de este autor zamorano, y que viene a ser una continuación de su obra «Alicia en el país de las maravillas” (2004), una recreación de la famosa novela de Lewis Carroll.

Interpretada por Laura Orduña, Niko Zamiatowski y Lorena
Roncero, la obra muestra como Alicia se hace mayor. Está mucho más alejada que
la primera del texto original de Lewis Carroll, recurriendo únicamente a
algunos elementos simbólicos para el desarrollo de la acción, «Alicia (atraviesa
el espejo)” es una gran metáfora sobre el paso de la infancia a la
adolescencia, concentrada en el espejo que, al devolver la imagen reflejada, da
conciencia de la existencia del sujeto, es decir, «cuando Alicia se mira al
espejo, se da cuenta de que existe”, explica el propio autor. En esta ocasión,
Alicia ya no entra en el mundo de los sueños, sino que «entra en su propio
mundo”, abre los ojos a la vida y se encuentra con la realidad, lo que hace que
su personaje crezca y sufra un importante cambio. Es la búsqueda del
conocimiento, pero también la búsqueda de un lugar en el mundo y de las
respuestas a las grandes preguntas de la vida.

SEGUNDA PARTE

Según Daniel Pérez, el gran éxito de «Alicia en el país de
las maravillas” fue lo que les obligó a crear esta segunda parte aunque, en
esta ocasión, la obra es un musical «más cerrado”, con canciones y coreografías
que forman parte del argumento. Según el autor, el mundo de Alicia es tan simbólico
que «da pie a que desde un punto de vista poético” se puedan mostrar los
aspectos más destacados de la vida.

Daniel Pérez vuelve a contar con Réplika, una gran compañía,
dirigida por Jaroslaw Bielski y Socorro Andón, que posee, según él, «una
concepción del espectáculo diferenciadora del resto de compañías”, que queda
reflejada en el hecho de que forman a sus actores dentro de su propia escuela
de teatro, enseñándoles «una forma de trabajar que los hace diferentes al resto”
y que les permite desarrollar espectáculos donde no sólo interpretan, sino que
también cantan y bailan.