El Teatro Nacional de Catalunya (Barcelona) ha abierto una temporada incierta con “Decamerón”, una obra que se mete en nuestras conciencias. “Decamerón” está compuesta por 10 monólogos muy diversos entre sí, pero que todos nos adentran en el mundo tan raro y oscuro que nos ha tocado vivir. El espíritu decameroniano de la obra está desde el inicio con un homenaje a Passolini que hace 50 años hizo la película inspirada en la novela de Boccacio.
Diez noches, diez historias, que bajo este espíritu nos hacen ver este presente tan desconcertante y desesperanzador. Los cuentos eróticos se convierten en poemas desgarrados que en algunos momentos tienen un pequeño viso de esperanza. Diez escritores, diez directores y diez interpretes cada uno ellos narrando una historia de su pequeño mundo. Cada una de ellas con personalidad propia. Unas más poéticas, otras realistas, alguna un poco desagradable, pero desde luego ninguna indiferente.
La obra empieza con un manifiesto al nuevo teatro, homenaje a la vida de Passolini y termina prácticamente enterrando al maestro. No se puede hacer una sinopsis de una obra sin argumento que va dando continuamente golpes en el estómago del espectador.
Las diez piezas son: “Fantasmas de la noche (Un nocturno)”, de Narcís Comadira. Dirección: Marta Angelat. Con Víctor Pi; “Poesía, per l’Zlatan (Manifesto per un nuevo teatro)” de Davide Carnevali. Arribas. Dirección: Ferran Dordal Lalueza. ConMelcior Casals; “La luz del futuro no deja ni por un instante de herirnos”, de Marta Marín-Dòmine. Dirección: Yvette Vigatà. Con Carol Muakuku; “Tantalio”, de Dimitris Dimitriadis. Dirección Albert Arribas. Con Sàskia Giró; “Hambre”, de Najat El Hachmi. Dirección: Ester Nadal. Con Adriana Fuertes; “Saliva legal”, de Cristina Morales. Dirección: Neus Suñé. Con Desirée Cascales Xalma; “El arboricultor”, de Perejaume. Dirección: Mia Parcerisa. Con Paula Blanco; “La esperanza ciega”, de Gregorio Luri. Dirección; Glòria Balañà Altimira. Con Pepo Blasco; “El ojo de la materia”, de Valère Novarina. Dirección: Xavier Albertí. Con Oriol Genís; y “Una visita al Museo Criminológico”, de Lluïsa Cunillé. Dirección: Imma Colomer. Con Lina Lambert.
Xavier Albertí director del teatro Nacional de Catalunya nos dice: “Los humanos disponen de un elemento precioso para afrontar las incertezas: la Cultura. O lo que es lo mismo: Nuestro bagaje compartido o compartible, reciente y remoto”. Creo que en este espectáculo se pueden ver y oír distintas voces que a veces se contradicen, pero retratan esta realidad tan plural que nos ha tocado vivir.