«EL CÍRCULO», DOCUMENTAL SOBRE LA DICTADURA URUGUAYA, PREMIO AL MEJOR FILME

El nuevo cine de denuncia fue el gran vencedor de la XXIII edición Festival de Cine Latinoamericano de Trieste, cuyo máximo galardón fue para un documental sobre los horrores íntimos de la dictadura en Uruguay. El conmovedor documento, con el emblemático título de «El círculo», de los uruguayos Aldo Garay y José Pedro Charlo, dirigente del movimiento guerrillero de los Tupamaros, al igual que el protagonista de la cinta, se llevó el premio al mejor filme.

Coproducido con Alemania, Chile y Argentina, el documental recorre el pasado aterrador del médico Henry Engler, reconocido actualmente por sus investigaciones en Suecia sobre el Alzheimer, quien regresó a su país tras años de ausencia para contar los horrores que padeció en las cárceles de la dictadura en Uruguay (1973-1984) y que le colocaron al borde de la locura. La cinta es una doble invitación a reflexionar sobre un pasado oscuro y también sobre los límites del ser humano.
Presentada en el pasado Festival de San Sebastián (España), no sólo es un viaje dantesco al pasado sino que también ilustra la búsqueda y las estrategias que el ser humano inventa para resistir y sobrevivir y ser un individuo mejor. «Es el científico de hoy que evoca al prisionero de ayer”, reconoce el chileno Rodrigo Díaz, director del festival de Trieste, que contó en esta edición con casi 200 largometrajes y cortometrajes de América Latina.
COLOMBIA
«La selección se realiza con total libertad”, sostiene Díaz, que este año incluyó un documental del disidente cubano Eduardo Lamora, «Cuba y el arte de la espera», sobre un nuevo viaje, esta vez a la isla caribeña, tras 27 años de exilio. Otra cinematografía poco conocida en el viejo continente, la de Colombia, fue premiada por «Los actores del conflicto», de Lisandro Duque. El director colombiano describe con humor la terrible situación de los cientos de secuestrados en Colombia y emplea la comedia y la sátira para denunciar uno de las mayores tragedias que vive actualmente ese país. El filme recibió el premio al mejor guión, mejor dirección y mejor interpretación, por la excelente actuación de Mario Duarte. También recibió el premio Cervantes, que concede el instituto cultural español del mismo nombre, por el «lenguaje realista y eficaz» que emplea para describir una realidad tan compleja como la colombiana.
La película «Alicia en el país», del chileno Esteban Larraín, que narra el mágico periplo de una niña quechua al recorrer 180 kilómetros a pie entre Bolivia y Chile en busca de una vida mejor, fue galardonado con el Premio Especial y Premio a la mejor Opera Prima.