UNA COMEDIA ÁCIDA CON Pere Arquillué, Àgata Roca, Nora Navas y Jordi Rico en el TEATRO ROMEA DE BARCELONA

Cesc Gay debuta como autor de teatro con «Els veïns de dalt». El cineasta, creador de largometrajes como «En la ciudad», «Ficción» o «Una pistola en cada mano», que tiene pendiente el estreno de «Truman» ha decidido dar el salto a los escenarios con una comedia ácida que habla de las relaciones de pareja. El espectáculo, en el Teatre Romea de Barcelona, permanecerá en cartel hasta el 17 de mayo.

«Els veïns de dalt» («Los vecinos de arriba2) toma como eje una cena entre dos parejas de vecinos que se encuentran en momentos muy diferentes en su relación. Mientras Anna y Juli están inmersos en la monotonía y los reproches, Laura y Salva disfrutan del momento y del sexo desinhibido. A lo largo de la velada, la conversación irá evolucionando para poner sobre la mesa aspectos íntimos y confrontaciones.

La historia empieza cuando una noche Anna (Àgata Roca) y Juli (Pere Arquillué) invitan a cenar a sus vecinos, Laura (Nora Navas) y Salva (Jordi Rico), para enseñarles el piso y agradecerles la ayuda que les dieron cuando se instalaron a vivir en el edificio. A medida que pasa la noche, Anna y Juli van descubriendo las tendencias sexuales de sus vecinos, hecho que los lleva a replantearse su propia relación de pareja, que está llena de reproches e inmersa en una monotonía. La confrontación con los vecinos y entre ellos, los lleva al límite y les hace tomar decisiones definitivas sobre su relación.

Para escribir el texto, Gay tomó como punto de partida una experiencia real vivida con unos vecinos demasiado ruidosos. Esta situación le llevó a escribir una comedia ácida en la que se abordan aspectos como la difícil convivencia en pareja, el amor, el sexo y la importancia de las apariencias. «Hace un par de años, unos nuevos vecinos ocuparon el piso de arriba donde vivimos con mi familia. En seguida empezamos a oír ruidos extraños, a cualquier hora, siempre seguidos de una gran variedad de gemidos y jadeos. Sin duda para mí fue inspirador, y así, sin quererlo, me acabaron regalando la que ha acabado siendo mi primera obra de teatro”, dice Gay.