El director mexicano Carlos Cuarón ha presentado en Sección Oficial del Festival de Málaga «Amalgama», una tragicomedia con el dolor como tema principal y que narra la catarsis emocional a la que se enfrentan sus personajes y que terminará por cambiarles la vida. La protagonizan los actores Manolo Cardona, Miguel Rodarte, Stephanie Cayo y Tony Dalton,
que interpretan a cuatro odontólogos. Al respecto Cuarón ha explicado que tenía claro que la profesión tenía que estar muy vinculada al tema principal de la película. Y precisamente los dentistas siempre están muy asociados al dolor, ha expresado, aunque en este caso han querido reflejar el dolor interior que van a experimentar los protagonistas conforme avanza la historia.

Cuarón –que también ha escrito el guión junto al guionista Luis Usabiaga- ha explicado que han querido mostrar la persecución emocional que van a vivir sus personajes cuando se escapan de un congreso médico a una isla del Caribe, donde permanecerán encerrados en una casa. Ese encierro genera una tensión emocional entre los protagonistas que tienen que superar sus egos y luchar contra sus debilidades y problemas. Sus personajes pasarán juntos un fin de semana caracterizado por los celos, la envidia y los excesos en una recóndita isla del Caribe que terminará marcando sus vidas para siempre.

La comedia va intrínseca en el guión a la hora de retratar lo más absurso de la condición humana. Y ha reconocido que la película integra mucha esencia teatral. De hecho, ha avanzado que le gustaría adaptar el largometraje a una obra teatral en un futuro. En este hilo ha añadido que conformaron la historia a partir de los personajes. Al tratarse de un largometraje en el que los diálogos y la conexión entre los actores tendrían todo el peso del guión, los actores han tenido que mantener un complejo equilibrio entre el drama y la comedia.

En el casting también cobró fuerza la edad de los actores para que se mostrasen cercanos con la realidad de sus personajes, perfiles de mediana edad, familiarizados con los conflictos personales propios de esta etapa de la vida, que estuviesen acostumbrados a experimentar decepciones y las continuas subidas y bajadas. Por último, Cuarón ha destacado que ha recurrido mucho a los planos secuencia, ya que considera que ayudan a trasladar a la gran pantalla esa esencia teatral que retrata el momento tal y como es, sin filtros ni artificios, ha concluido.