«Campeones de la comedia» es una obra llena de vis cómica –como se decía antes-, con un humor saludable, «educativa en valores» –como explica el programa de mano-, pero sobre todo se trata de una obra cargada de emoción, que conmueve, que invita e incluso desafía a superar las dificultades de la vida, que son muchas, y más para algunos –“la vida es una putada”, escribió Francisco Umbral-. Pero la obra invita a saltar obstáculos hasta alcanzar la utopía. La utopía es posible.
José de Luna, Gloria Ramos y Alberto Nieto, protagonistas de la inolvidable y premiada película «Campeones», y también de esta obra, lo han conseguido, han culminado la escalada. Se trata de tres actores fabulosos. Lo demostraron en el cine. También en anuncios publicitarios de radio y televisión. Y ahora lo confirman sobre las tablas de un teatro, día a día, ante el público –completamente lleno el Marquina de Madrid la tarde del estreno-, función a función, donde no cabe el error ni el más mínimo desmayo, donde todo ha de funcionar como un reloj. Actorazos.
“Trabajar en lo que más te gusta es lo mejor que te puede pasar en la vida”, afirma un personaje, siguiendo el texto escrito por David Marqués, también guionista de la película «Campeones», un texto que se hace decididamente emocionante al final, cuando casi es una autobiografía de los intérpretes protagonistas.
La obra se compone de varios cuadros y está llena de ingenio. La dirección de David Ottone inyecta agilidad. Y también el talento tantas veces demostrado por Yllana. La obra refresca. Deja la sensación en el espectador de que vivimos en un mundo mejor. Ojalá realmente sea así.