El actor rueda en Malta «World War Z», una de zombies

El clan Brangelina (padres, seis churumbeles y ejército de niñeras) se ha establecido en Malta, donde papá Pitt rueda «World War Z», actividad que le va a llevar todo el verano. El título se refiere a la epidemia zombie que casi aniquila la Humanidad. Los hechos ocurren una década después de la victoria humana sobre la amenaza. Pitt es Max Brooks, que se dedica a recorrer el mundo recogiendo historias de supervivientes.

«World War Z» es una historia postapocalíptica de horror, un género nuevo en la carrera de uno de los actores más demandados y poderosos de Hollywood. Brooks es algo parecido a un diplomático, perteneciendo a una Comisión Postbélica ligada a las Naciones Unidas, que debe publicar un informe tras la apocalipsis zombie. La película se basa en la novela «Guerra mundial Z: Una historia oral de la guerra zombi”, escrita por Max Brooks y narrada en primera persona.
Dirige el alemán Marc Forster (director del último Bond) y en el reparto, quizá Ed Harris, Mireille Enos («The Killing») y Matthew Fox, de la serie televisiva «Lost». Para ser el padre de seis y recorrer el mundo, Pitt se mantiene muy ocupado. Pronto estrenará una de las campeonas del último Cannes, la maravillosa «El árbol de la vida», de Terrence Malick y ha rodado ya una de béisbol, «Moneyball», con Jonah Hill, en la que es Billy Beane, un manager de los A’s de Oakland que revoluciona el juego analizando jugadas desde un PC.
Y ya finalizada también, «Cogan’s Trade», de Andrew Dominik, en la que es el Cogan del título, que se encarga de investigar un formidable golpe ejecutado durante un juego de póquer protegido por la Mafia. En el reparto, tipos duros como James Gandolfini, Ray Liotta, Sam Shepard (que esta semana estrena «Blackthorn» de Mateo Gil) y el ubícuo Richard Jenkins.