Su protagonista, Maribel Verdú se impone en la categoría de mejor actriz y José Sacristán logra el premio a mejor actor

La pelúcula «Blancanieves» de Pablo Berger sigue sumando premios. En la noche de este martes 22 de enero ha obtenido XVIII Premio Cinematográfico José María Forqué, que concede EGEDA (la entidad que gestiona los derechos de los productores audiovisuales) como la mejor película española del pasado año. Su protagonista, Maribel Verdú ha logrado el de de mejor actriz y José Sacristán el de mejor actor mejor actor.

La gala, celebrada en los Teatros del Canal de Madrid, ha asistido el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, que se ha mostrado conciliador.
«Qué subidón, cómo me gustan los premios», han sido las primeras palabras del director Pablo Berger cuando ha recogido el premio, que ha dedicado a todo su equipo, y especialmente, «porque hoy es la noche de los productores», al suyo, Ibón Cormenzana. Desde el escenario, ha resaltado las dificultades que han rodeado el rodaje de esta película, muda y rodada en blanco y negro, que se ha impuesto al resto de cintas con las que también competirá por el Goya: «Grupo 7» de Alberto Rodríguez), «Lo Imposible» de Juan Antonio Bayona y «El Artista y la Modelo» de Fernando Trueba).
José Sacristán y Maribel Verdú se han alzado con los premios a Mejor Interpretación Masculina y Femenina, respectivamente, por sus trabajos en «Madrid, 1987», dirigida por David Trueba, y «Blancanieves». El veterano actor madrileño se ha impuesto a Antonio de la Torre (nominado por su papel en «Grupo 7» de Alberto Rodríguez) y al intérprete francés Jean Rochefort («El Artista y la Modelo» de Fernando Trueba). En el apartado femenino, también aspiraban al premio Macarena García, por «Blancanieves», y Carmina Barrios por su papel en «Carmina o Revienta», dirigida por su hijo Paco León.
Maribel Verdú, que ha recogido el premio de manos de los actores Juan Diego Botto y Verónica Echegui, ha querido compartirlo con su compañera de reparto y también finalista, Macarena García, y con el director Pablo Berger. «Gracias por contar conmigo, por cogerme de la mano y tirarnos a esta piscina hace siete años, gracias por tu cabezonería», ha pronunciado Verdú, antes de emocionarse en el escenario al recordar a su madre.
Más sobrio ha sido el discurso de José Sacristán, que dentro de unas semanas opta al Goya por otro papel distinto en la película «El Muerto y Ser Feliz». A sus 75 años, el actor ha recordado a sus desaparecidos «compañeros de quinta» y sobre todo al cineasta que da nombre a los premios, José María Forqué, «una persona que admiré, respeté y quise», ha confesado Sacristán, que también ha tenido palabras para David Trueba. «Hay proyectos que son un premio desde que te los proponen», ha afirmado sobre la película de «Madrid, 1987».