La escritora Almudena Grandes ha fallecido este 27 de noviembre de 2021 a los 61 años de edad debido a un cáncer que le fue diagnosticado dos años antes. Nacida en Madrid el 7 de mayo de 1960, la escritora era Patrona de Honor de la Fundación Academia de cine, y es que como una de las figuras que más y mejor ha retratado España a lo largo del Siglo XX, Almudena Grandes deja una huella fundamental en nuestro arte, no solo literario sino también cinematográfico. Sus historias, antes, después o durante la guerra, siempre eran comandadas por grandes personajes femeninos, y trataban el amor, el sexo, la amistad y la búsqueda personal de nuestra identidad. Y ella, de alguna forma, siempre ha formado parte del universo cinematográfico español.
El cine ha tenido en su literatura una fuente fundamental de inspiración: «Las edades de Lulú» (1990), «Malena es un nombre de tango» (1996), «Aunque tú no lo sepas» (2000), «Atlas de la geografía humana» (2007) o «Castillos de cartón» (2009). Además, en la película «A contratiempo» (1982) hacía un breve cameo.
Desde pequeña quiso ser escritora, pero por voluntad de su madre —quien deseaba que se dedicase a una «carrera de chicas»— ingresó en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid, aunque, según confesión de la autora, hubiera preferido estudiar latín. Tras titularse, comenzó a trabajar escribiendo textos para enciclopedias. También hizo algún papel en el cine («A contratiempo», de Óscar Ladoire). Siendo hija y nieta de «escritores de poesía aficionados», afirmó que nunca se ha dedicado a otro género que no fuera el narrativo, género por el cual sentía «una gran pasión y a la vez una gran frustración». La primera novela que publicó fue «Las edades de Lulú» (1989), obra erótica que ganó el XI Premio La Sonrisa Vertical y fue llevada al cine por Bigas Luna al año siguiente. El libro tuvo un gran éxito y fue traducido a más de veinte idiomas. El desmedido éxito de su primera novela, según declaraciones de la autora: «le regaló la vida que ella quería vivir y jamás podrá saldar esa deuda».
Su siguiente novela, «Te llamaré Viernes» (1991), ya apartada del género erótico, no tuvo gran repercusión. Sí la tuvo, en cambio, «Malena es un nombre de tango» (1994), que Gerardo Herrero adaptó al cine en 1996. Ese mismo año se publicó una recopilación de relatos titulada «Modelos de mujer», algunos ya conocidos anteriormente por haber aparecido en alguna de sus frecuentes colaboraciones en la prensa. Uno de ellos, «El vocabulario de los balcones», inspirado en un poema de Luis García Montero, sirvió de base para el largometraje «Aunque tú no lo sepas», que Juan Vicente Córdoba dirigió en 2000.
«Atlas de geografía humana» (1998), «Los aires difíciles» (2002) y «Castillos de cartón» (2004) continuaron su obra novelística. Como sus obras anteriores, todas transcurren en la España del último cuarto del siglo xx o principios del xxi, mostrando con técnicas realistas e introspección psicológica la vida cotidiana de personajes de esta época.
En 2003 se publicaron una serie de artículos que habían aparecido en El País bajo el título de «Mercado de Barceló» y en 2005 continuó su obra breve con «Estaciones de paso», un nuevo libro de relatos en el que se recogen cinco historias cortas sobre el planteamiento que varios adolescentes realizan ante distintas situaciones, que no son capaces de entender ni comprender, pero que, puesto que es su vida, han de vivir. La película «Los aires difíciles», basada en su novela homónima, se estrenó en 2006; dirigida por Gerardo Herrero, fue protagonizada por José Luis García Pérez, Cuca Escribano y Roberto Enríquez.
En 2007 publicó «El corazón helado», extenso y complejo relato en el que se plasma la vida de dos familias españolas a lo largo de gran parte del siglo xx. Esta novela ganó al año siguiente dos importantes premios: el José Manuel Lara y el del Gremio de Libreros de Madrid. El 23 de marzo de 2007 se estrenó la película «Atlas de geografía humana», basada en su novela homónima. Protagonizada por Cuca Escribano, Montse Germán, María Bouzas y Rosa Vilas, fue dirigida por Azucena Rodríguez, amiga de la escritora.
Su novela «Inés y la alegría» (2010) —con la que inició la serie «Episodios de una guerra interminable»—, obtuvo en México el Premio Elena Poniatowska. Fue calificada de «portentosa obra narrativa que, montada en la tradición galdosiana escrita contra viento y marea, contra la tendencia general en nuestro tiempo, de andar con prisas, tanto del lado de quien la construye como de quien la lee». En 2018 consiguió el Premio Nacional de Narrativa por «Los pacientes del doctor García».