La escritora e historiadora María José Rubio y el guionista Tirso Calero trabajan ya en el guión de «Prim: Conspiración de poder»

«Prim: Conspiración de poder» es el título provisional de la película que contará los entresijos del asesinato del general Prim en 1870. Un crimen que cambió el curso de todo un país y que en la actualidad todavía ofrece versiones contradictorias. La escritora e historiadora María José Rubio y el guionista Tirso Calero trabajan ya en el guión. No se ha designado aún direector para la película.

«Prim: conspiración de poder» estará producida por Óscar del Caz, a través de su empresa Digital Cine Media, productor de pelóculas como «Enloquecidas», «León y Olvido» o «El dios de madera». el estreno de «Prim: Conspiración de poder», se prevee para el año 2014 y ya cuenta con el beneplácito de la Sociedad Bicentenario General Prim 2014, que tiene como objetivo difundir y promover el conocimiento de esta capital figura en la historia de nuestro país.

María José Rubio es una reconocida escritora especializada en Historia Española y entre sus publicaciones destacan «La Chata; «Reinas de España. Siglos XVIII-XXI. De María Luisa Gabriela de Saboya a Letizia Ortiz» y «Reinas de España. Las Austrias. Siglos XV-XVII. De Isabel la Católica a Mariana de Neoburgo». Actualmente ultima su primera novela, «El cerrajero del rey», que será publicada por La Esfera de los Libros en 2012. Además, es una estudiosa de la figura del general Prim, uno de los personajes más importantes y singulares del siglo XIX español.
Tirso Calero tiene una amplia experiencia como guionista de televisión («Amar en tiempos revueltos», «L’Alqueria Blanca») y es creador de la serie de época «Bandolera». En el terreno cinematográfico, fue argumentista del film «Miguel y William» y director y guionista de «Carne Cruda».
El general Juan Prim (Reus, Tarragona, 1814 – Madrid, 1870) se integró en el Ejército para defender el Trono de Isabel II desde el comienzo de la Primera Guerra Carlista (1833-40), sin embargo posteriormente cospiró contra ella hasta su salida del trono. En el inmediato gobierno provisional presidido por Serrano, Prim se encargó del Ministerio de la Guerra; en las Cortes constituyentes defendió la definición del nuevo régimen como una monarquía democrática, que quedó plasmada en la Constitución de 1869. Serrano pasó entonces a ejercer la Regencia mientras se encontraba un rey para el Trono vacante, sustituyéndole Prim como presidente del Consejo de Ministros. Desde ese cargo fue uno de los principales defensores de la candidatura de Amadeo de Saboya; pero unos días antes de que éste llegara a Madrid para iniciar su reinado, Prim murió asesinado en un atentado cuya autoría nunca ha podido ser esclarecida.