El programa «Dias de Cine» de TVE, Premio de Honor del certamen

El actor Lluis Homar recibirá el Premio Nacho Martínez del próximo Festival de Cine de Gijón. Este galardón nace en 2002 como homenaje al desaparecido actor para reconocer los valores humanos y la trayectoria vital de los profesionales del cine. El protagonista de películas como «Eva», «Los abrazos rotos» o «La plaza del Diamante» acudirá a Gijón para recoger el premio el próximo 20 de noviembre, en un acto que tendrá lugar en el Teatro Jovellanos.

También el Festival Internacional de Cine de Gijón otorga el Premio de Honor de la 54 edición a «Días de Cine», mítico programa de TVE que cumple 25 años en 2016.

Hablar de la carrera de Homar es recorrer las últimas cuatro décadas del cine, la televisión y el teatro en nuestro país a través de personajes que se comen las pantallas y llenan los escenarios. Desde su debut, en 1982, a las órdenes de Francesc Betriu, en esa costumbrista historia de posguerra que es «La plaza del diamante», hasta «La fosa» (Pere Vilà i Barceló), su voz ha envuelto decenas de historias en el cine, transformándolas en historias inolvidables a través de personajes imprescindibles. Esto es lo que Lluís Homar consigue en cada interpretación: insuflar credibilidad a cada tipo al que da vida. Quizá sea porque, según dice, le gusta implicarse personalmente, ir más allá de lo profesional para que los resultados sean mejores.

En la gran pantalla, Homar ha desempeñado muchos papeles, como Max, el robot mayordomo en la película de ciencia ficción «Eva» (2011), de Kike Maíllo, papel que le vale su primer Goya. Otros roles destacados son su participación en «La mala educación» (2004) y «Los abrazos rotos» (2009), de Pedro Almodóvar, su interpretación del Papa Alejandro VI en «Los Borgia», de Antonio Hernández, o Gonzalo, el cerebro de «Los Pelayos», de Eduard Cortés.

También ha trabajado con algunos de los directores más destacados del panorama español en más de cuarenta títulos: Mario Camus («La ciudad de los prodigios»), Vicente Aranda («Si te dicen que caí»), Pilar Miró («El pájaro de la ciudad»), Gerardo Vera («La Celestina»), Ventura Pons («Morir o no») o Montxo Armendáriz («Obaba»), Manuel Gómez Pereira («Reinas») y Julio Medem («Caótica Ana»).

Un 6 de octubre de 1991, domingo, comenzaba la emisión de Días de cine. Dirigido por César Abeytua, duraba media hora, no tenía presentador, era en 4:3, y hacía un alarde de la mejor postproducción que la época permitía. Ahí comenzó una de las grandes declaraciones de amor al cine que se han hecho (y se hacen) en nuestro país.

Con el tiempo llegó la actriz Aitana Sánchez Gijón, y luego Antonio Gasset, quien además dirigía el programa. Gasset fue el rostro del espacio durante trece años. Sus comentarios ya circulaban por internet cuando las redes sociales no estaban ni soñadas. «Días de cine» se convirtió, sin prisas pero sin pausas, en un programa de culto, fruto del carisma y acidez de su director, pero también por la calidad del trabajo que surgía desde una redacción siempre entregada al cine.

Aquella media hora se convirtió en una hora. Los días cambiaron, del domingo inicial, Días de cine fue pasando por el sábado, el viernes, incluso los miércoles, hasta llegar a asentarse definitivamente los jueves. Fue siempre seña de identidad de «Días de cine» contar las cosas con espíritu libre y crítico. El FICX no escapó a las redes que el equipo de este mítico programa echaba en los festivales más prestigiosos y/o sugerentes del mundo. Nuestras propuestas en las dos últimas décadas han estado también en la redacción de «Días de Cine», y de ahí han traspasado la pantalla para llegar a la gran comunidad de cinéfilos que siguen el programa de TVE cada semana.