UNA COMEDIA QUE REMEMORA UN ENCUENTRO FAMILIAR EN 1979, CUANDO SE TEMÍA QUE EL SATÉLITE ESTADOUNIDENSE CAYESE SOBRE FRANCIA

La francesa Julie Delphy prosigue su interesante trayectoria como directora paralelamente a sus trabajos como actriz. La directora de «2 días en París» o «The Contess», dirige desde esta semana en la Bretaña francesa, su cuarto largometraje, una comedia titulada «Le Skylab».

«Le Skylab» es una crónica en clave de comedia sobre dos días en la vida de una familia formada por la propia Delpy junto a Eric Elmosnino, Sophie Quinton, Marc Ruchmann, Michèle Goddet, Aure Atika y Bernadette Lafont. En el reparto figuran asimismo Jean-Louis Coulloch, Vincent Lacoste (César 2010 al mejor actor revelación por «Les beaux gosses»), Noémie Lvovsky, Candice Sanchez, Albert Delpy, Valérie Bonneton y Denis Menochet
La propia Julie Delphy es también la autora del guión. El filme, narrado en forma de flash back, sigue a una mujer llamada Albertine (la propia Julie Delpy), en un viaje en tren con su marido y sus dos hijos. En el trascurso del trayecto, rememora otro viaje que realizó cuando tenía diez años, en 1979.
Entonces Albertine se encuentra con sus padres y su abuela materna, de camino hacia la casa de la Tía Suzette, la hermana mayor de su padre, para pasar las vacaciones de verano. Es el cumpleaños de la abuela paterna y toda la familia (tíos, tías, primos…) se ha reunido para la celebración. Las comidas interminables durante las que se producen discusiones airadas sobre política, racismo, sexualidad y educación sirven para transmitir las angustias de los adultos a los hijos, pendientes de todo. El Skylab, el satélite estadounidense lanzado por la Nasa, que da título al filme, se convierte de este modo en un monstruo enorme sobre el que se fantasea, cuando no es más que una de las obsesiones de Anna, la madre de Albertine, una mujer tan encantadora como nerviosa, convencida de que el satélite se estrellará en la costa oeste de Francia.
La película está producida por Michaël Gentile y Lauraine Heftler y se rodará durante siete semanas, casi exclusivamente en Bretaña, salvo una jornada en París. Su estreno en Francia tendrá lugar en la primavera de 2011.