«Petra», de Jaime Rosales, y «Carmen y Lola», de Arantxa Echevarria, figuran en la programación de la sección que celebra 50 aniversario
La Quincena de Realizadores ha devuelto el protagonismo al cine en español en el Festival de Cannes con una selección en la que casi una tercera parte de sus largometrajes en competición están filmados en ese idioma. La mano tendida a cineastas de España y América Latina compensó la menor presencia que en esta próxima edición habían tenido hasta ahora en las secciones oficiales del certamen y en el otro apartado paralelo, la Semana de la Crítica.
«Petra», de Jaime Rosales, y «Carmen y Lola», de Arantxa Echevarria, figuran en la programación de la sección que este año celebra su 50 aniversario. Además de las dos cintas españolas seleccionadas, la Quincena se inaugurará con «Pájaros de verano», de Ciro Guerra y Cristina Gallego, tres años después de que el colombiano visitara Cannes con «El abrazo de la serpiente». Y también se verán, habladas en castellano, «Cómprame un revolver» del mexicano Julio Hernández Cordón, un film descrito como un cruce entre «Peter Pan» y «Mad Max»; «El motoarrebatador», del argentino Agustín Toscano, y «Los silencios», de la brasileña Beatriz Seigner. Igualmente, el franco-argentino Gaspar Noé, que tras escandalizar en 2015 en Cannes con «Love», proyectada fuera de competición, exhibe ahora «Climax», una cinta cuyo título, según los organizadores de la Quincena, habla por sí solo.
De los 20 largometrajes escogidos destacan además «Mandy», del italiano Panos Cosmatos, un filme de acción y de horror protagonizado por el estadounidense Nicolas Cage, o «Le monde est à toi», del francés Romain Gavras, que lleva a la gran pantalla a Isabelle Adjani y Vincent Cassel.
